Abstract
En las dramaturgias del siglo XXI se vuelven porosas las fronteras entre ficción y realidad, autor y creación, obra y lectores-espectadores, entre el teatro y otras artes. En este artículo consideramos la fisura de los bordes –el pasaje de un género a otro, de un texto a otro, de lo monologal a lo dialogal, y viceversa–, para analizar lo que se sitúa en el entre, ese tercer lugar donde se tensionan distintos territorios. Pensamos el entre desde el teatro de Alejandro Tantanian, teniendo en cuenta sus reflexiones y tres de sus obras, Tyse, Y nada más y Marina: allí, el entre es espacio de creación y paisaje donde se cruzan, atraviesan y transforman literatura y teatro, vida y poesía, puesta en página y puesta en escena, mediante diversos procedimientos de escritura dramatúrgica que aquí analizamos.